En un intento por que nadie sepa bien quien soy ni lo que hago cree algo que nadie sabe bien que es ni de donde viene. Estoy hablando de Ranchapart, o Ranchapart Inc.
Ahora que lo pienso Ranchapart es todo. Todo lo que pienses que puede ser. Lo único seguro es que su origen tiene que ver con la mítica banda punk Rancho Aparte. Y nada más que eso. Pero Ranchapart creció y se transformó en un movimiento que abarca todo y nada a la vez.
Ranchapart Inc. puede considerarse como un colectivo integrado por una cantidad no especificada de personas que se dedican a los más variados rubros: música, pintura, escritura, cine, fotografía, diseño, reparación de aire acondicionado, filosofía, literatura, boxeo, abogacía, cocina, periodismo y sobre todas las cosas la mentira organizada. Pero mentiras de verdad.
Nadie está muy seguro que este grupo exista. O que hagan todo lo que dicen hacer. O que hagan aunque sea una sola cosa. Ni siquiera sus miembros. Si es que tiene miembros. Por que en estos casos no se entregan credenciales ni diplomas que aseguran su pertenencia. La base filosófica libertaria provoca una incertidumbre que no puede ser aclarada por nadie. Algunos integrantes de Ranchapart ni siquiera saben que forman parte. Otros ni siquiera lo oyeron nombrar.
Ranchapart no apoya seriamente ninguna causa que no esté ya perdida (sobre todo del amor), no tiene sede permanente, no cede, ni tiene estatutos. Nadie avisa cuando son las reuniones, ni donde (por lo general son en un bar al azar), ni para que. En dichas reuniones se bebe hasta lograr una amnesia parcial que impide recordar que temas se trataron y cuales fueron las conclusiones y decisiones tomadas (justamente).
Otros dicen que Ranchapart es sólo una persona. De carne y hueso. Y otros dicen que es un demonio autoconvocado.
En realidad nadie se detiene a pensar mucho en esto. Porque como dice el manifiesto jamás escrito de la agrupación “Ranchapart tiene un pasado oscuro, un futuro incierto y el presente, el presente es mentira”.